Afortunadamente cuando me comprometo a hacer algo siempre hago hasta lo imposible por cumplir los objetivos, esto es algo que he aprendido con el tiempo, que tenemos que ser dedicados en lo que somos, conocer lo que hacemos, involucrarnos en lo que hacemos.
Cuando mi hermano iba a entrar a la universidad le dije:
«Jose, tienes que pensar bien lo que quieres estudiar y que lo hagas porque te gusta no por el dinero, cuando haces las cosas porque te gustan el dinero siempre viene por compensación, aveces dicen que hay profesiones que no valen la pena, pero yo creo que si, todas valen la pena y con todas se puede hacer dinero, pero tiene que gustarte lo que haces…»
¿Por qué le decía esto a mi hermano? Es muy fácil de entender :), en Colombia una carrera profesional dura aproximadamente 5 años, algunos duran menos otros mas :D, pero ese es el promedio… ¿Te imaginas tu estudiar por 5 años algo que no te gusta? Un Karma total!!, pero eso no es todo; después de haber estudiado 5 años te tocará trabajar TODA LA VIDA en algo que no te gusta, esperando siempre que se acabe el día para ir a tu casa a descansar de tu peor pesadilla.
En cambio, si haces las cosas bien, con cariño, con gusto, con placer, con dedicación, con disciplina; seguramente te irá mejor que a muchos, y todo porque haces lo que te gusta y lo haces bien! Serás bien recompensado, seguro.
Ayer vi un video en donde decían algo muy cierto, los Colombianos (generalizando) creemos que la vida es fácil, qué el dinero es fácil, que todo lo merecemos… y es una total mentira!, es algo que hemos mal-aprendido del narcotráfico, el secuestro, el terrorismo, donde vemos que el dinero a montones se gana fácil, pero no es así, el dinero se gana con esfuerzo, con trabajo, con mucho trabajo o con un baloto 🙂 pero son muy pocos (por no decir que es un engaño) los que se ganan ese tipo de loterías.
Me gustaría compartir un fragmento de un artículo que escribió Sergio Mejias qué dice:
«Nuestra filosofía determina nuestra actitud. La actitud determina las acciones. Las acciones determinan los resultados, de modo que si no te agrada tu estilo de vida, échale un vistazo a tus resultados. Si no te gustan tus resultados, modifica tus acciones. Si no estás contento con tus acciones, modifica tu actitud. Y si no estás contento con tu actitud, cambia tu filosofía.»
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